El estar enamorado de una persona que está comprometida con otro(a), produce una gran dosis de sufrimiento y dolor. ¿Por qué me gustan las parejas comprometidas? ¿Por qué se repite esto en mi vida?
Algunas personas parecen sentir una atracción especial, por los triángulos en las relaciones. Incluso si la pareja se separa de su mujer o su marido, pierden por completo el interés. Y luego más adelante cuando su ex pareja tiene a otro, de pronto se dan cuenta que “que siguen enamorados de su ex”. ¿Por qué me gustan las parejas comprometidas?
Aprendemos a relacionarnos a través del modelo de pareja que observamos de nuestros padres o de nuestro sistema familiar. En consecuencia, se hace necesario profundizar en esa relación primaria para ver lo que hay oculto detrás de dicha repetición.
«Es más cómodo ser la amante»
Carolina vino a consulta desesperada, porque todas sus amistades le decían que tenía que resolver su situación de pareja. Lleva siendo amante de un hombre casado 12 años. Y está pensando en tener un hijo.
Me explica que no sabe qué problema hay en ser la amante… «Que es más cómodo ser la amante». Esa frase me hace reflexionar y le pregunto «¿Quién dice eso?» Se queda sorprendida, titubea y dice: «No sé, creo que yo»
Este es el típico caso de implicación sistémica. Es probable que exista alguien en el sistema, que vivió algunas de las siguientes características:
- Estuvo en un matrimonio obligado y añoraba un primer amor.
- Sufrió en un matrimonio por conveniencia
- Quedaron hijos ilegítimos en el sistema. Se rechazó a la amante y no se les permitió a sus hijos, ser parte de la familia
O bien que haya tenido rivalidad con el progenitor del mismo sexo, por el amor del otro.
¿Cuáles son las causas sistémicas?
Incapacidad para comprometerse
Cuando por ejemplo, un miembro del sistema familiar ha sido víctima de infidelidad y toda la vida se ha quejado por esta situación. Normalmente los descendiente tienen miedo a sufrir el mismo destino. Entonces, se dicen a sí mismo: “No sufriré como mamá/papá entonces soy la amante…para que nadie me tome por tonta”. ¿Te sientes la oveja negra de tu familia?
Perpetuar el triángulo Madre-Padre-Hija(o):
Cuando uno de los padres no está disponible porque está sobre vinculado a su propio sistema familiar, entonces uno de los hijos se hace “pareja energética” de uno de los padres. Y se establece, una especie de complicidad y por otra parte de rivalidad con el otro padre. Esto es lo que entiende la persona por amor. Y lleva este triángulo, a sus relaciones de pareja. Como la única forma que tiene de relacionarse.
Rivalidad Fraterna
El niño puede sentirse menos favorecido que sus hermanos. El haber percibido estar a la sombra de un hermano(a). Que atrae toda la atención de los padres. Genera en el corazón del niño, un profundo resentimiento. Luego más adelante, una pareja se convierte en su proyección de mamá o de papá. Y la pareja de éste se convierte en el hermano(a) con el cual siente la necesidad de competir. En estos casos, normalmente se manipula a la pareja para que deje al otro a cualquier precio.
Parentificación
La Terapia Contextual de I. Bosrzormenyi Nagy (1985) habla, del cambio de roles del hijo con los padres. Nos hacemos leal a uno de los padres y en consecuencia, llevamos sus deseos como propios. Ocupando el lugar del adulto (del padre o a la madre).
El asumir el rol de “madre o padre” , afecta su relación de pareja. Atrayendo para sí parejas inmaduras, que dependen de ella o de él. Pero, que necesita un amante porque no disfruta la sexualidad con alguien que asume el papel de su «progenitor». ¿Quieres mejorar la relación con tus padres?>>>
Dinámica familiar no resuelta
Cuando en el sistema familiar se ha interrumpido un amor ya sea por un accidente o por muerte prematura. El vacío que se siente es muy grande. Y normalmente se tiende a inhibir este dolor.
En consecuencia, queda una especie de añoranza en todo el sistema. Entonces, la persona que lleve esta carga sistémica, siempre buscará a esa persona «especial». Para llenar la añoranza de alguien de la familia, por lealtad sistémica. Y en cada nueva pareja tendrá la sensación de encontrarla. Y como la persona ya está comprometida con otro, repite la historia ancestral de ser «la otra o el otro».
«Todos queremos lo que no se puede, somos fanáticos de lo prohibido.»
Mario Benedetti
Recomendaciones para salir de la dinámica
- Reconocer la dinámica oculta tras la situación: profundizando en ella sin culpabilizarse. Observa tus añoranzas, si nunca estás satisfecho con una pareja o te ves envuelto en asuntos de infidelidades.
- Trabajar responsablemente: en el camino de vuelta al amor propio y el compromiso consigo mismo. Estando el tiempo suficiente sin pareja, para reflexionar sobre lo que deseas y mereces.
- Sanar las heridas infantiles: transformar la sobre vinculación o vinculación tóxica con los padres y hermanos. Para poder relacionarse saludablemente con los demás.
- Profundizar en el árbol genealógico: buscando historias de “solterías” o “amores interrumpidos”. El hacerlo consciente ya de por sí es profundamente sanador.
«Quédate con un amor que te dé respuestas y no problemas.
Seguridad y no temor.
Confianza y no más dudas.»
Paulo Coelho
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Escrito por Luz Rodríguez
Contacto: [email protected]
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